Un
día una clienta me trajo ésta silla para que le restaure, me enamoré en el
primer momento en que la vi, no puede ser más hermosa!!! y en el mismo momento
pensé la cantidad de años que debería tener…
Le
pregunté como la obtuvo y me contó un poquito la historia, que vale la pena que
se los cuente, para que entiendan el valor sentimental que tiene a demás de ser
una simple silla antigua…
Ella
siempre le comentaba a su amiga que quería una silla con esas características
para ponerla en la habitación de su beba, la que en ese entonces estaba en su
panza de 8 meses de embarazo… hasta que un día que se encontraban juntas la
amiga la invita a abrir el altillo donde tenía todos los recuerdos de su abuela
y encuentran dos sillas iguales, una estaba en perfecto estado y la otra no
tanto… Así fue como la amiga le regaló una de las sillas y ella me la trajo
para restaurar y dejarla nueva para el cuarto de su beba llamada Paloma.
Obviamente
antes que nada comenzamos por limpiar muy bien con un paño húmedo y CIF CREMA
toda la silla…
Luego
lijamos con lija Nro. 80 al agua y encolamos con cola de carpintería todas las
partes flojas de la silla
Pintamos
color blanco con sintético al agua
Una
vez que la pintura está bien seca vamos a gastar con lija en algunos sectores
sobre todo en los bajo relieve y molduras que tiene la silla… para simular el
desgaste natural por el paso del tiempo.
El
siguiente paso es buscar la tela con la que queramos tapizar el asiento y
armarlo con una buena goma espuma de alta densidad.
La
silla ya está lista para que forme parte de la habitación de Paloma!!
Anímense
a restaurar muebles antiguos!!!
Besos
y nos encontramos en el próximo post junto a CIF que nos ayuda a dar nueva vida
a objetos con historia, sin esfuerzos y dejándolos brillantes!!
ELI
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